Domingo 08 de Noviembre

Hola papás y mamás,
Seguro que estáis deseando saber como les fue el viaje y llegaron vuestros hijos e hijas. Después de todos los nervios del sábado por la noche llegó el gran día del viaje el domingo, en el que vosotros ya estuvisteis presentes. El viaje fue bien, sin novedades. Realizamos dos paradas, una muy breve y otra para comer en Ribadesella. Allí nos esperó el Sol y disfrutamos de una comida muy especial, con las maravillosas vistas del Sella y del mar Cantábrico, con la cordillera Cantábrica de fondo, todo un espectáculo. Después de comer, subimos hasta la ermita para sacar alguna foto más y disfrutar desde otra perspectiva de un paisaje envidiable. Hubo que subir unas pocas escaleras, aunque ya había quien decía que estaba cansado… ¡y eso que era el primer día! Eso sí en cuanto llegaron arriba y vieron todo estaban contentos y ya nerviosos para continuar el viaje y conocer el albergue y a los niños de A Coruña.
Una vez en el Palacio de la Teyería primer contraste al no oír hablar ni una sola palabra en castellano. Conocieron a sus monitores de diversos países: Estados Unidos, Escocia, Australia, … y se distribuyeron por habitaciones ¡qué emoción! ¿Con quién me tocará? Reunión de nuevo y prueba de nivel. Unos cuantos juegos y toca deshacer maleta, ducha, cena y velada…así que mañana más y mejor. Qué tengáis buenas noches!! BYE!!




Vaya día para las y los de Agro do Muíño.
Primer día de actividad. El madrugón mereció la pena. El viaje fue muy fructífero: hicimos tres paradas, la primera por imperativo de aseo personal; la segunda, la que teníamos prevista, en la Playa de las Catedrales. Fue una pena, teníamos marea alta y no pudimos pasear aunque sí bajamos a la primera. Alguna casi se moja los pies en el salto de una pequeña ola.
La segunda parada fue la de Gijón. Nos apeamos en el puerto deportivo y comenzamos el paseo por el mirador de la ciudad vieja. Reponemos fuerzas con los bocatas en la zona vieja y luego caminamos por el paseo de la playa de San Lorenzo para subir al autobús y tras un recorrido de una hora llegamos al Palacio de la Teyería, lugar de residencia durante esta semana.
Una vez que entramos se presenta el personal del Caserón desde el jefe, cocinera, camarera, encargado y monitores. Como es inmersión lingüística, empezamos, todo en inglés. Normas, distribución de las habitaciones y primera actividad de contacto con las otras niñas y niños de Burgos.
Excitante. Es difícil empezar unas rutinas en un lugar extraño y con gente extraña, y para más inri, en inglés.
Creo que al final conseguiremos superar las dificultades.